En esta zona de la isla se encuentran algunas de las vistas más bellas de la naturaleza y el mar. Aquí se encuentran playas como Cala Vedella, Cala Jondal y Cala Tarida. El pintoresco pueblo, a unos 15 minutos de la ciudad de Ibiza, organiza muchos eventos para sus residentes, como excursiones a la montaña más alta de Ibiza, Sa Talaia.
Recién terminada, esta casa a estrenar, de estilo finca 2.0, ofrece todo lo que cualquiera podría desear. La calidad de construcción es sencillamente impecable. Deja volar tu imaginación en este novedoso estilo de casa y hazla tuya.
La casa se divide en dos niveles. Luz a raudales, privacidad y libertad son las sensaciones que experimentarás nada más cruzar la puerta principal de madera y a lo largo de los 460 m2 del nivel superior de la casa. Después, un largo corredor conduce a 6 amplios dormitorios, todos con baño ensuite. Si accedes por el otro extremo de la casa, te encontrarás directamente en el salón, con una cocina abierta en la que prácticamente cualquier persona estaría encantada de cocinar. Las correderas hacia la terraza se abren con un suave empujoncito con el dedo. En el exterior se encuentran la terraza y la piscina, de 60 m2, lista para unas cuantas brazadas. ¡Hay que mantenerse en forma después de esas comidas ibicencas interminables! Desde el salón, la terraza y la piscina se puede disfrutar de la vista al mar y a la puesta de sol. Más hacia abajo encontramos el sótano, de 480 m2, que puedes usar como garaje, gimnasio, cine o para cualquier otra actividad. Aparte, hay un anexo/casa de invitados independiente de 60 m2. Esta villa es absolutamente perfecta para evadirte de de la ajetreada vida urbanita. En cuanto entras en la casa, levantas el pie del acelerador. Las vistas generan una gran tranquilidad, ya que todo el alrededor es tan verde, y de fondo el mar azul… Por supuesto, habrá que volver al trabajo, pero con unas vistas como estas y un chapuzón en la piscina entre tarea y tarea, todo es más llevadero. Contacta con nosotras para más información.La zona rodea Sa Talaia, la montaña que se alza orgullosa en el centro.
Los visitantes pueden subir la montaña en poco más de una hora, empezando en la iglesia del pueblo blanco. Una vez en la cima, puedes disfrutar de unas impresionantes vistas panorámicas de la isla, que te ofrecen un ángulo de Ibiza que ningún otro lugar del mundo puede igualar.
La playa de Cala Comte es una de las más conocidas de la isla, y por una buena razón. Con sus aguas cristalinas y sus suaves arenas doradas, esta franja paradisíaca de 800 m hace que lugareños y turistas vuelvan todo el año. También es uno de los mejores lugares de Ibiza para ver la puesta de sol, con multitudes que se reúnen aquí cada tarde para ver cómo el sol se funde en el suave horizonte.